¿Quiénes Somos?

Una iglesia que consciente y voluntariamente profesa fe en Jesucristo como único Salvador, se somete a sus enseñanzas tal como se encuentran contenidas en las Sagradas Escrituras y se une para la mejor realización de sus fines que las mismas Escrituras enseñan.

Las finalidades esenciales de esta Iglesia son: La adoración a Dios en espíritu y verdad, la predicación del Evangelio para la salvación de los perdidos, la edificación de los santos y la comunión de éstos entre sí.


Declaración de Fe

LAS SAGRADAS ESCRITURAS

Creemos que las Sagradas Escrituras – Antiguo y Nuevos Testamentos - en sus documentos originales, son inspiradas divinamente en su totalidad, sin error, dignas de toda confianza, y constituyen nuestra suprema autoridad en todo lo concerniente a nuestra fe y conducta.

DIOS

Creemos que hay un solo Dios vivo y verdadero, personal, eterno, perfecto en justicia y santidad, infinito en poder, sabiduría y bondad, el cual es Hacedor y Sustentador de todo cuanto existe. Que en la unidad de la Divinidad existen tres personas: El Padre, el Hijo y el Espíritu Santo, los cuales son iguales en sustancia, atributos divinos y gloria.

El Hombre

Creemos que el hombre es un ser creado por Dios a su imagen y semejanza, compuesto de cuerpo y espíritu cuya unión constituye al hombre SER viviente. Debido a la caída, el hombre quedó constituido en hombre-pecador, por naturaleza y con una tendencia innata al pecado que se manifiesta en una vida pecaminosa, en consecuencia está destituido de la gloria de Dios y es merecedor de la condenación. Solamente por la gracia de Dios puede ser salvado en virtud de la obra de Cristo a su favor y previo el arrepentimiento y la fe en Él.

LA SALVACIÓN

Es el fruto de la obra de Jesucristo a favor del hombre e incluye los siguientes aspectos:

Expiación: Creemos que la muerte de Cristo tuvo como objeto la expiación de los pecados de los seres humanos y que sólo en virtud de los méritos de su muerte puede el hombre ser reconciliado con Dios y plenamente salvado.

Arrepentimiento y fe: Creemos que es en virtud de la predicación de la Palabra de Dios que el hombre conoce su condición de perdido y la oferta gratuita de salvación por Cristo. Este conocimiento le ha de llevar a una convicción y a un dolor – arrepentimiento - por haber ofendido a Dios, y si consciente de su necesidad clama al Señor y confía – Cree - en la obra de Jesucristo viene a ser un verdadero creyente. – Justificado -.

Justificación: Creemos que es un acto jurídico en virtud del cual Dios “acepta” al pecador y le “declara” justo, gracias a la obra vicaria de Jesucristo. Siendo Dios el justo y el que justifica al que es de la fe de Jesús. (Rom. 3:26).